
A las doce en punto de la noche, a una con las campanadas de la Iglesia de Santa María de Tafalla, iniciaban su curioso caminar, encabezados por el capellán de la hermandad, José Manuel Pérez de Eulate.

Después de hacer el viaje, en silencio, hasta la basílica de Ujué, "los Doce" reponen fuerzas tras escuchar misa. Un momento especial, y que se repite posteriomente a las 6 de la mañana en la Cruz del Saludo, camino ya de vuelta a Tafalla, es cuando los hermanos, arrodillados y con los brazos en Cruz rezan una salva a la Virgen, entonando también el "Regina Coeli", que un día compusiera el insigne Felipe Gorriti, siendo él un miembro más de la hermandad y que viene a ser como su himno.

Tras el almuerzo y una visitan a la ermita de San José, en Tafalla, "los Doce" vuelven a hacer su entrada en Santa María, a las doce en punto del mediodía.
Un viaje de recogimiento, enigmático y para algunos misterioso, que sigue perdurando, afortunadamente, en nuestros días.